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Un santuario de Canadá compartió el video de un oso pardo abandonando su guarida invernal tras meses de hibernación, y captó tanto la atención en Internet que se hizo viral.
El Oso Boo, de 20 años, vive en el refugio Kicking Horse, en Golden, Columbia Británica, desde julio de 2003. Cuando era tan solo un osezno de 16 semanas, él y su hermanito peludo quedaron huérfanos por culpa de un cazador furtivo que asesinó a su mamá.
Como todavía no había ningún programa de rehabilitación y cría para los dos oseznos no había muchas opciones: o la cría en cautiverio o la eutanasia. Por suerte, el refugio natural Kicking Horse estaba desarrollando un programa de rehabiliación y los pequeños oseznos fueron los primeros en participar.
“Hoy en día, más de 30 cachorros de oso pardo en situaciones similares han recibido una segunda oportunidad en la naturaleza gracias a estos programas”, explicó Cat Cowan gerente de Kicking Horse a The Epoch Times.
Los encargados del refugio natural pusieron un gran empeño por cuidar a los oseznos y permitirles desarrollar sus capacidades instintivas. A pesar de los esfuerzos, el hermano de Boo no pudo superar su primera hibernación y falleció por torsión del intestino delgado.
La hibernación de los osos es mucho más compleja y peligrosa de lo que nos podemos imaginar. “Se sabe que detienen el flujo sanguíneo hasta en un 75% en sus extremidades para conservar la energía. Ralentizan su sistema metabólico, y documentamos que la frecuencia respiratoria de Boo es de hasta tres respiraciones por minuto mientras está en la guarida. Por no hablar de que los osos no comen, orinan ni defecan durante todo el periodo de torpor”, dijo Cowan.
Cowan monitorizaba la cámara que se colocó encima del refugio de Boo para tratar de asegurarse de que todo iba bien. “Después de escuchar algunos crujidos de la capa de nieve y de ver cómo asomaba la nariz un poco, preparamos la cámara”, dijo Cowan.
Video cortesía: Refugio de Osos Grizzly Kicking Horse
Después, compartió las extraordinarias imágenes de Boo saliendo de la madriguera en Facebook. Ya que las personas no suelen tener el privilegio de observar este evento, se hicieron virales, acumulando más de 5 millones de visitas y unas 67,000 reacciones.
“También ayuda a crear una narrativa sobre los osos, su comportamiento y la ecología”, añadió Cowen.
¡Sin duda la salida de Boo es un acontecimiento muy especial para celebrar!