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De una forma completamente natural, una Bebé asumió el papel de cuidar a los pollitos de la granja familiar. Estas pequeñas criaturas se ven encantadas del cariño que les da con sus pequeñas manitos regordetas.
La pequeña Leo nació en una familia que quiere criar a sus hijos de forma especial. Viven en un pequeño pueblo de Granite Falls, Washington. La mamá, Soli es originaria de México y conoció al papá, David, en Washington después de mudarse allí. La pareja comparte su amor por la naturaleza, así que juntos decidieron montar una microgranja cerca de las montañas donde guian a sus hijos a cuidar a todos los seres.
Para Leo, las gallinas y los pollitos son sus mejores amigos con los que comparte grandes momentos de felicidad. Soli recuerda cómo empezó todo. Compraron una caja de pollitos en una tienda de animales. La dependienta, preocupada les dijo que no dejaran que Leo tocara los pollitos porque era demasiado pequeña para tener cuidado con los animalitos.
Por esta razón, los padres solo dejaban acariciar a los pollitos en su presencia tanto a Leo como a sus hermanos mayores, Sebastián y Lucía. Sin embargo, enseguida se dieron cuenta de la gran sensibilidad que tenía su bebé. Rebosante de ternura los trataba con gran cuidado.
Video cortesía de Soli
“Pude ver la alegría en sus ojos cuando se dio cuenta de que esos pollitos la necesitaban y empezó a cuidarlos”, dijo Soli a The Epoch Times.
Desde ese día el lazo entre los esponjosos pollitos y la pequeña se ha hecho cada vez más fuerte. Incluso ahora que ya son gallinas disfrutan durmiendo en brazos de la nenita mientras ella las arrulla. Leo guarda trocitos de fruta que ellas se comen con gran entusiasmo.
“Algunos días, cuando Leo tiene momentos difíciles, salimos a pasar tiempo con sus gallinas y luego vuelve a casa con una gran sonrisa”, agregó Soli, que muy feliz de que su hija aprenda a disfrutar de las pequeñas cosas de la vida.
Soli y David se esfuerzan por enseñarles a sus hijos la amabilidad. De esta forma sus pequeños aprenden la felicidad que da en el alma la bondad y la compasión.
Video cortesía de Soli
¡No cabe duda que a la pequeña Leo le encanta la naturaleza!
