Por amor a los animales, un camarero de un Starbucks de Kelowna, Canadá, les está alegrando el día a las mascotas de sus clientes a quienes sorprende con una deliciosa crema batida que los vuelve locos de felicidad.
Graham Shonfield, de 30 años, se considera un "gran amante de los perritos" y adora ver lo felices…