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Un perrito anciano conmovió tanto al personal de una veterinaria por su carisma y ganas de vivir, que decidieron hacerle una emotiva despedida antes de irse a casa.
Cuando Jota, un perrito de 11 años, llegó a la Veterinaria Vet´s de Santiago comuna de Ñuñoa, en Chile, a medidos de agosto por una hernia, captó de inmediato la atención de todos los funcionarios.
“Es un perrito muy regalón y cariñoso (…) cada vez que lo interveníamos y andaba mañoso, había que decirle todo lo que estábamos haciendo. Ejemplo: ‘Jota ahora vamos a darte vuelta, ahora vamos a limpiar tus puntos, etc'”, dijo Lorena Rodríguez, enfermera de la veterinaria Vet´s, a Vacaláctea.
“Durante su hospitalización paso de brazo en brazo de las enfermeras, era muy consentido por todos”, añadió.
Sin embargo, mientras Jota se recuperaba de la intervención por la hernia, desarrolló una peritonitis que lo llevó a la UCI.
Con ayuda de transfusiones, intervenciones quirúrgicas y un plan terapéutico para combatir sus problemas de salud, Jota logró salir adelante, a pesar de su avanzada edad.
El perrito pasó más de 20 días superando sus problemas de salud en la veterinaria, pero con mucha fuerza y ganas de vivir finalmente le dieron de alta.
Una linda despedida
Ante la gran noticia, todos los funcionarios estaban muy contentos y decidieron hacerle un reconocimiento.
Cuando llegó el momento de que Jota se fuera a casa, los funcionarios de la veterinaria se organizaron en dos filas a cada lado, con banderas de su país, y aplaudieron mientras él salía. La emoción se apoderó de todos en el lugar.
Al inicio Jota se sorprendió y se detuvo un instante para observar a todas las caras conocidas, y luego siguió adelante para encontrarse con sus dueños.
Video cortesía de Lorena Rodríguez
“Fue muy hermoso, todos estaban emocionados, pero faltaron muchos que no estuvieron de turno. Pero [fue bueno] ver que se pudo ir caminando”, añadió Lorena. “La reacción de sus dueños fue hermosa, el esfuerzo que hicieron con él y no querer rendirse, se les agradece mucho”.
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Para los funcionarios la historia de Jota fue un ejemplo de lucha y trabajo en equipo de todos los involucrados.
“Trabajamos día y noche en equipo para lograr sacar adelante nuestros pacientes”, aseguraron en una publicación en Instagram. “Cuando los resultados son los que esperamos pasan estas cosas y nos dan la fuerza y la FÉ para seguir adelante cada día”.
Ahora Jota está en casa a lado de sus dueños, Karen y Patricio, quienes se mostraron agradecidos por el adorable gesto con su perrito.
“[Está] mejorando, en casa, con algunos remedios, pero ya sin los puntos de la herida en su estómago, está súper activo y atento, con mucho ánimo”, dijo Karen a Vacaláctea. “Nos encanto el gesto que tuvieron, su cariño hacia nosotros fue inmenso”.
