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Una enfermera fue más allá de su deber al ayudar a su paciente hospitalizado rescatando a su perrito, poniéndolo a salvo y luego cuidándolo.
Jennifer Smith recibió una llamada el día después de Acción de Gracias, de John Burley, uno de sus pacientes, de 60 años. John estaba muy preocupado por su perro llamado Boomer.
“Llegué al trabajo el lunes después de Acción de Gracias y el teléfono sonó a las 7 de la mañana”, dijo Smith a CNN. “John llamó desde su habitación del hospital diciendo: ‘¡Boomer está en una perrera! ¡Boomer está en una perrera! Boomer es el mundo de John”.
Jennifer notó muy alarmado a John, ella tiene 12 años de experiencia como enfermera y sabía lo importante que era apoyarlo. Igual que él, estaba preocupada por lo que pudiera sucederle a Boomer.
“Tomó aire y me preguntó: ‘¿Cuidarás a Boomer? Y yo le dije: ‘Por supuesto, John. Encontraré a Boomer y lo cuidaré por ti”, dijo Smith a CNN.
John y Jennifer se conocieron en el centro médico Grand Rehabilitation and Nursing Center de Rome de Nueva York, gracias a un programa de atención médica diurna para adultos en el que supervisan a pacientes que lo requieren. Los pacientes pueden socializar con otras personas mientras reciben atención médica.
John estuvo viviendo solo con su perro, Boomer, en un apartamento. Adoptó a su mascota en Arkansas desde que era un cachorro, posteriormente se mudaron a Nueva York.
La familia de John vive en Arkansas, lo que explica por qué cuando enfermó por neumonía y problemas pulmonares, nadie podía cuidar a su perro. Afortunadamente Jennifer pudo hacerlo.
Jennifer recuerda que cuando conoció a John, él hablaba todo el tiempo de su perro Boomer, le encantaba ver sus fotos y mostrarlas a los demás.
Su amiga enfermera tuvo que buscar a Boomer en diferentes albergues de la ciudad, ya que John no sabía en cuál se encontraba su adorado perrito. Al llamar a Rome Humane Society, Jennifer finalmente lo encontró.
“Me entró un poco de pánico porque no sabía cuánto tiempo llevaba en el refugio o si ya había sido adoptado por otra familia. Es la época de Navidad y la gente recibe animales”, dijo.
“Le dije a John que yo también tengo un perro de 13 años que tengo desde cachorro, así que entiendo perfectamente su miedo. Me entristeció el corazón por él y por Boomer”.
Jennifer acudió al siguiente día por Boomer, que se encontraba dentro de una enorme jaula. Smith dijo: “Bien, ¿dónde están los papeles de adopción? Me lo voy a llevar a casa”.
Por supuesto, Jennifer se comunicó con John para hacerle saber que Boomer estaba bien y que pronto lo llevaría a casa con ella.
“Fue una preocupación menos para John, que tiene que enfocarse en mejorar y cuidarse, y saber que Boomer está en buenas manos”, dijo Smith.
Mientras John se recuperaba, Jennifer cuidaba de Boomer y lo llevaba al trabajo para que pudiera visitar a John. “Esto ayuda a John en su proceso de curación y le da tranquilidad”, dijo Smith.
Jennifer y Boomer se hicieron buenos amigos también, así como el resto de los residentes quienes disfrutan de acariciarlo cuando está de visita en el hospital.
“Que John vea a Boomer es el único regalo de Navidad que necesito en este momento”, dijo Smith, quien, como es lógico, dijo que estudió enfermería para poder ayudar a la gente.