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Una familia ucraniana que tuvo que huir de casa en medio de los bombardeos por la guerra se sorprendió al regresar cuatro meses después y encontrar a su amigo fiel esperándolos en la puerta.
Katerina Titova, de 35 años, y su familia se vieron obligados a dejar atrás a su querida mascota, un husky siberiano de 9 años llamado Belyi, mientras los misiles rusos caían alrededor de su casa en la ciudad de Hostomel.
La desgarradora imagen de Titova huyendo de la mano de su hija Tajisia de cinco años en medo de un ataque aéreo ruso le dio la vuelta al mundo.
Después de huir de casa, la familia se dirigió a Vinnitsia, una ciudad en el centro-oeste de Ucrania, donde permaneció casi 4 meses.
Al inicio de esta semana, después de la guerra, la familia regresó a su hogar y encontró a su adorado perro Belyi rodeado de las ruinas de la casa, esperándolos al lado de la puerta.
“En medio del horror de ser el objetivo de Rusia y nuestra desesperación por irnos, tuvimos que tomar la desgarradora decisión de dejar atrás a Belyi. Es un milagro que haya sobrevivido sin nosotros. [Pero] él esperó pacientemente como si hubiésemos ido a la tienda y no hubiésemos ido en meses.”, dijo Titova a The Sun.
“Lloro cuando veo lo que queda de nuestra ciudad ahora. Pero el hecho de que Belyi esté vivo es un regalo y algo positivo a lo que nos aferramos mientras tratamos de reconstruir nuestras vidas destruidas”, agregó Titova.
Belyi saltaba de alegría y se veía muy feliz de ver a su familia de nuevo.
Titova encontró sus pertenencias destruidas y agujeros de bala en las paredes.
“Nuestra casa está en pie, pero necesitaba nuevas puertas, ventanas y un techo”, dijo Titova.