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Una gata herida estaba inmóvil en medio de una carretera. Parecía muerta y sin esperanzas. Sin embargo, un ángel guardián acudió en su ayuda. Estaba decidido a rescatarla a pesar de su fiereza. Gracias a él su vida cambió totalmente de rumbo.
La pobre gata estaba inmóvil en medio de una carretera en junio de 2021. Theoklitos Proestakis, o Takis, como es conocido por todos, se encontraba manejando su auto por Leptera, Creta, donde tiene su refugio de animales. Repentinamente encontró a la gata en su camino. Como estaba totalmente inmóvil, Takis pensó que estaba sin vida. De todas formas, decidió frenar y acercarse siguiendo su intuición.
Cuando estaba a un metro de distancia la gata volvió en si y huyó a toda velocidad a pesar de tener una pata rota. Ella no sabía que Takis es un rescatador experto con un gran corazón. Entonces, cuando el trató de acercarse a ella, la gata comenzó a bufarle de forma amenazante.
Sin embargo, Takis sabía lo que tenía qué hacer. Sin demorarse un segundo, fue a su coche y agarró su guante protector para este tipo de situaciones. La piel es tan gruesa que hasta las garras de un tigre tendrían problemas para traspasarlo. La pequeña gata no tendría las garras de un tigre pero sí tenía su fiereza y luchó a pesar de sus heridas.
Estaba tan asustada que pensaba que su rescatador en realidad quería lastimarla. Se veía tan amenazante y tenían tanta fuerza sus arañazos que Takis decidió ponerle el nombre de la antigua diosa griega de la guerra Athena.
Cuando al fin pudo agarrarla de una pata la metió en su coche y la llevó directa a su refugio. Allí le pusieron una escayola en su pata accidentada que le daba un aspecto muy cómico pero que al menos la ayudó a curarse.
“Al principio, estaba muy asustada. Pero después de pasar tiempo con ella en el dormitorio, y luego estaba con otro gato, poco a poco comenzó a confiar en mí… entendió que podemos ser amigos”. Dijo Takis a The Epoch Times.
Athena estuvo poco tiempo en el refugio de Takis. Consiguió una familia que la adoptara apenas cinco meses después de ser rescatada en los Países Bajos. Gracias al amor de sus nuevo dueños se convirtió en un osito de peluche muy mimoso.
Pero las dificultades no se habían acabado para ella. Después de que se curó la pierna rota, se descubrió que Athena tenía rótulas sueltas, todavía tenía dolor y necesitaba una cirugía bastante cara. La nueva propietaria de Athena, Jessica Bos, recaudó una enorme cantidad de 3.815 euros (aprox. US$4,030) en menos de un mes, gracias a generosos donantes, muchos de los cuales habían seguido su historia desde el principio.
La recuperación fue bastante lenta y tuvo que permanecer sin moverse durante cuarenta días. Después de aquello parecía que había mejorado bastante pero volvió a enfermarse. La rodilla no había terminado de cicatrizar bien y tenía una infeción. Después de un nuevo tratamiento médico sus dueños pensaron que no les daría más preocupaciones. Sin embargo, una madrugada no fue a dormir con ellos como de costumbre y descubrieron que se estaba ahogando con algo. Cuando llegaron los servicios de emergencia veterinaria descubrieron que tenía una brizna de hierva atascada entre la nariz y la garganta. Pero para tranquilidad de todos se la pudieron retirar de forma exitosa.
Su dueña comenta en su publicación: “Es una gata muy difícil, cara, pero dulce y encantadora, con muchos problemas, jaja.”
Después de todas las vueltas que ha dado su vida, Athena se encuentra a salvo y feliz con una familia que se desvela por mantenerla a salvo. Ahora pasa los días tranquila, con ellos, sus nuevo amigos gatunos y todo el amor que necesita.