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Una mamá oso y sus cachorros vivieron una difícil situación al quedar atrapados en un desagüe; afortunadamente los vecinos la escucharon e hicieron todo lo posible por ayudarla.
Los residentes de Simsbury, Connecticut, escucharon a una osa pidiendo ayuda a gritos a altas hora de la noche del 3 de agosto y salieron a revisar.
Se sorpredieron al encontrar a una osa y dos cachorros atrapados dentro de una alcantarilla, e inmeditamente llamaron a la policía.
“Estaba llorando más que enojada”, dijo el residente Scott Conrad a NBC Connecticut. “Estaba llorando y gimiendo porque tenía a sus cachorros con ella”.
Al llegar al lugar y ver la dificultad, la policía avisó al Departamento de Energía y Protección Ambiental (DEEP). Cuando los rescatistas llegaron, algún tiempo después, los osos se habían movido de un lado a otro tratando de encontrar una salida.
“Era realmente como un laberinto debajo”, dijo Jason Hawley, biólogo de DEEP Wildlife al medio. “Estábamos tratando de averiguar dónde podrían estar los osos”.
Cuando finalmente los encontraron, el equipo de rescate puso una escalera y un tronco en un intento de que los osos subieran a la superficie.
“La mamá oso y los cachorros estaban como acobardados allí abajo”, escribió Libby Lord, una fotógrafa local que registró el rescate con su cámara, en una publicación en Facebook.
Para animar a la mamá oso a trepar al tronco, uno de los biólogos imitó el llamado de un cachorro de oso.
Al escuchar el sonido, la osa se asomó rápidamente a la superficie con mucha curiosidad.
“Entonces ella salió, echó un vistazo, y regresó para animar a los cachorros a salir también. Él primero subió y salió, y se movió hacia un árbol cercano, así que la mamá fue a buscar al otro cachorro”, agregó Lord en el posteo.
Luego, la mamá oso salió con el otro cachorro y los tres se alejaron hacia un área tranquila de árboles.
“Es un final feliz porque cualquier otra cosa no hubiera sido tan buena”, agregó Conrad a NBC Connecticut.
Para los que se preguntan cómo llegaron los osos a las alcantarillas, Lord tiene una idea.
“Hay una gran alcantarilla justo abajo de la carretera que tiene mucha agua al fondo, que pudo haberlos atraído, y es fresco por dentro, así que deben haber entrado y luego no estaban seguros de cómo volver a salir”, dijo la fotógrafa en el posteo en Facebook.
“Todo lo que puedo decir es que estoy agradecida de haber estado allí, y quedé asombrada por las personas de DEEP especialmente, junto con la Policía Estatal de Conservación del Medio Ambiente, la Policía de Simsbury y otros trabajadores de la ciudad que también colaboraron de todas las formas que pudieron. ¡Buen trabajo a todos!”, concluyó Lord.
