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Una cacatúa que se estaba celosa del hijo de su dueña, cedió ante la ternura del pequeño, y ahora son grandes amigos.
Grietje, gestora de proyectos digitales en Bélgica, es una apasionada de los loros. Desde hace varios años tiene a una hermosa cacatúa llamada Marnie como mascota.
Cuando quedó embarazada no sabía si Marnie era muy consciente de lo que significaba que su vientre no parara de crecer y crecer. Sin embargo, parecía muy interesada.
“Tenía mucha curiosidad, cuando mi vientre creció, lo eligió como el lugar perfecto para sentarse. Siempre he bromeado diciendo que ayudó a empollar el huevo” dijo Grietje a The Epoch Times.
La mujer sabía que tenía que presentarle poco a poco a Remi, su nuevo hijo, ya que las cacatúas pueden morder y ser imprevisibles. Incluso recuerda que cuando nació Remi, Marni estaba muy celosa. Pero como suele ocurrir con los hermanos mayores, los celos iniciales se transformaron en un fuerte sentimiento de cariño.
“Cuando Rémi dormía encima de mí, cuando estaba despierto, tomaba leche, comía, se bañaba… Decidí que se conocieran desde el principio”añadió Grietje. “Las señales de Marni siempre fueron muy claras y nunca me ha mordido, ni a Rémi”.
Con el paso del tiempo, se hicieron grande amigos. Ahora el pequeño Remi ya tiene dos años y disfruta su tiempo con la cacatúa. Le da de comer, le lima las uñas, la abraza y le da mimitos. Sin embargo, Marni también se cansa de la energía incansable del pequeño. Entonces, simplemente se aleja y se posa en un lugar donde Remi no pueda alcanzarlo.
Video cortesía de @marnithecockatoo y de Marni the Cockatoo
Grietje es muy consciente de que Marni también necesita tiempo de calidad con ella para que no se sienta desplazado y su vínculo permanezca fuerte. Por eso, aprovecha cuando Remi está plácidamente dormido para disfrutar de un rato juntos. El mimoso Marni no se cansa de las caricias y el cariño que le da su dueña.
Una cacatúa en casa
Tener una cacatúa como mascota requiere mucho tiempo, dedicación y cuidado. Además, suelen ser ruidosas y costosas. Grietjee recomienda a todas las personas que estén pensando en tener este tipo de mascota que que informen bien de todo lo que requieren.
A pesar de ser hasta 10 veces más inteligentes que un perro, las cacatúas no son fáciles de cuidar y, como un niño chiquito, necesitan mucha atención.
“No son ni mucho menos las mascotas más fáciles de tener, y muchos loros terminan yendo de casa en casa”, explicó Grietje.
Por este motivo, también recomienda que la mejor opción a la hora de conseguir una cacatúa es adoptar.
Video cortesía de @marnithecockatoo y de Marni the Cockatoo